Monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito
(1918-1996), fue uno de los ciudadanos mas notables de la historia dominicana contemporánea.

En treinta y nueve años de episcopado supo representar papeles tan notables y variados como el de pastor de dos diócesis bien diferentes (Santiago e Higüey), fundador y rector de la primera universidad privada del siglo XX, actual Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, administrador sede plena de la arquidiócesis de Santo Domingo, presidente de la Academia Dominicana de la Historia durante tres períodos consecutivos (1986-1995) y mediador nato en los conflictos de los que merodearon en la agitada década de los años setenta.

Su participacion fue decisiva como pastor de nuestra Iglesia Católica en momentos claves para la aplicación de los postulados del Concilio Ecuménico Vaticano Segundo, en la época de puesta al día entre una Iglesa que que durante siglos se había expresado en latín y de repente tenía que modernizarse con todas las dificultades de un mundo que cambiaba. El sentido práctico que tuvo en su vida Monseñor, permitieron que se desarrollaran las nuevas corrientes, y que no hubiera una ruptura entre la Iglesia tradicional y los nuevos tiempos, su obra y su liderazgo fueron decisivos para llegar en la República Dominicana a lo que es hoy la Iglesia de la Nueva Evangelización.

El lema que escogió para su escudo episcopal en 1954 'Non recuso laborem" tomado de los escritos de San Martín, obispo de Tours, resume con exactitud lo que
él siempre fue y profesó: no le tengo miedo al trabajo, ni los cambios me asustan.